sábado, 30 de noviembre de 2013

Emotiva despedida de Moreno


El saliente secretario de Comercio Interior habló ante un nutrido grupo de trabajadores de la dependencia en la que trabajaba. "La diferencia entre los que luchan y los mercenarios es el amor. Cada uno de ustedes aprendió a saber por qué pelear y esto no se lo van a olvidar nunca en la vida", les dijo a sus empleados. Mirá el video en la nota.

El secretario de Comercio interior, Guillermo Moreno, dedicó unas sentidas palabras, en su despedida, a los empleados de la dependencia que ocupó desde 2005, cuando fue nombrado por el ex presidente Néstor Kirchner.

Moreno, quien desde pasará a ser agregado económico de la embajada de Italia, sostuvo: "Compañeras, compañeros, la despedida y evaluación la hicimos hace dos años. La hicimos como corresponde, la hicimos en el Salón del 9no piso. Evaluamos 6,7 años de gestión. Habíamos consensuado oportunamente que terminaba la gestión, después nuestra conductora cambio de opinión y pasaron algunas cosas. Toda la evaluación que hice aquella vez sigue vigente".

Mientras hablaba, un grupo nutrido de trabajadores de la Secretaría seguís su discurso con banderas, paraguas y bombos y lo filmaban con celulares, para guardar sus palabras para la posteridad. "Nosotros estamos entregando un país mucho más justo hoy, del que recibimos en el 2011 y en esto la secretaria de Comercio tuvo mucho que ver", dijo.

"Y fueron valientes, con dos ejes muy claros", continuó Moreno. "El primero, ser valientes para luchar, porque está claro que los muchachos de privilegio no van a entregar la torta porque le ganemos el debate nacional o porque le ganemos votos. Ese es el prerequisito para hacer lo que después hay que hacer y es claro que nosotros estamos entregando un país mucho más justo hoy, del que recibimos en el 2011 y en esto la secretaria de Comercio tuvo mucho que ver", agregó.

"Fueron valientes y fueron justos. La diferencia entre los que luchan y los mercenarios es el amor. Cada uno de ustedes aprendió a saber por qué pelear y esto no se lo van a olvidar nunca en la vida. Lucharon y amaron, fueron valientes. Hasta siempre", concluyó.



Ver Otros Videos de la Despedida a Guillermo Moreno. Están muy buenos! 1 2 3 4

jueves, 21 de noviembre de 2013

El "Polémico" funcionario, el gran militante



Luego de adoptar duras medidas tendientes a frenar una escalada inflacionaria en la canasta alimentaria básica, impulsada por el precio de la carne y justificada por la Sociedad Rural en la pérdida de vientres y escasez de stock (aunque desde el gobierno se consideraban maniobras de corte especulativo basadas en el desabastecimiento), el polémico Secretario de Comercio declaró ante un medio de prensa: "Los comportamientos antisociales tendrán su correspondiente sanción, porque en la Argentina ahora gobierna la democracia. Quienes aprovecharon la situación deberán atenerse a las consecuencias, pues nosotros no renunciaremos a la aplicación de todos los mecanismos legales a nuestro alcance como la ley de abastecimiento, la legislación sanitaria e impositiva, la ley de defensa de la competencia. Puede haber cierres y se acentuará la fiscalización. Cuando a mí me dicen que atento contra la libertad de comprar y vender, yo pregunto si no se atenta contra la libertad de alimentarse cuando la libertad de comprar y vender en condiciones monopólicas, en condiciones usurarias, elimina la libertad de consumir que se merecen todos los argentinos."

Esto acontecía en marzo de 1984 (apenas a 3 meses de iniciado el gobierno de Alfonsín, con una economía estrangulada y un estado inexistente ante el poderío de las corporaciones económicas), el funcionario en cuestión era Ricardo Campero, y tras decretar una veda de carne vacuna durante una semana, impulsaba “acuerdos de precios” para los pescados y otras carnes. En la oportunidad aludió a la existencia de una "campaña ideológica” y que “esta estrategia de los sectores desplazados del poder tiende a que Alfonsín reine pero que no gobierne o lo haga en el marco de una coalición de centro derecha, porque no son capaces de aguantar seis años para entonces medirse en la arena electoral."

Estos intentos de domar a los sectores concentrados de la economía, no sólo le valieron a Alfonsín el abucheo en la Sociedad Rural, también el temprano escarnio periodístico, las puteadas de las Doñas Rosas en el mostrador de las carnicerías y hasta la ridiculización en medios “progresistas blancos” que se consideraban afines. Recuerdo la “Milonga Campera” publicada por entonces en la revista Humo®, ironizando sobre el intento de convencer a los consumidores (en su propio beneficio y como colaboración a la lucha anti-inflacionaria) de diversificar las fuentes de proteínas cárneas:

“La vaca es un animal
Odioso y mal entrazado
Peludo por todos lados
Con caspa y con mal aliento
Que se la pasa mugiendo y
Estorbando en los asados.”

Terminaba el versito con un “que porquería es la vaca y cuan absurdo su rol”.

Apenas dos años duró la “resistencia al régimen”. En diciembre de 2005, su abanderado, un combativo Bernardo Grinspum, debió ceder la jefatura del Ministerio de Economía al mucho más ortodoxo Juan Vital Sourrouille (aplaudido por el stablishment), privatizador frustrado y padre de dos criaturas (Plan Austral y Plan Primavera) que fueron el preludio del noventista Plan de Convertibilidad. El polémico e intervencionista Secretario de Comercio fue sustituido por un hombre de diálogo y consenso, de buenos modales y amigable con los mercados: Roberto Lavagna, un prolijo técnico y “componedor nato” (que ya había pasado por un cargo similar –Director Nacional de Política de Precios de la Sec.Com.- no muy exitosamente en 1974). Si tal como se afirmaba por entonces, el demonizado intervencionismo era la causa de la inflación, pronto se encargarían en recordarnos que las actitudes laxas y la liberalización de los mercados se relacionaban directamente con la hiperinflación, el hambre, la destrucción del aparato productivo, el default y la crisis terminal de las finanzas del Estado (a pesar del congelamiento de salarios y el “achique” del Estado). 


Otro Polémico Secretario de Comercio de la época de Alfonsín, fue el nunca bien ponderado Ricardo Mazzorín. En realidad (y he aquí lo indicativo) no fue su gestión en sí la cuestionada, sino una medida en particular de 1988. Por una similar situación de mercado a la relatada al inicio, pero esta vez con su sucedáneo principal, la carne de pollo (lock out patronal - desabastecimiento especulativo - maniobra alcista). Mazzorin, en nombre del Estado importa, para abastecer el mercado y contener los precios, 38 mil toneladas de pollo. De allí en más, una mezcla explosiva entre la inoperancia radical, la presión de los grandes productores y la complicidad mediática, dio lugar a todo tipo de mitos y especulaciones que lograron desactivar la medida y mantener el precio por las nubes. Los “la gente” se hacían eco de las versiones más disparatas propaladas por sus expoliadores, juraban ver filas de camiones deambulando con los cadáveres avícolas en estado de descomposición e infectados por la radioactividad de Chernovil y aplaudían el contundente informe de un joven notero Daniel Hadad, desenterrando pollos recién comprados de los basurales aledaños a la Capital. 

El escarnio a Mazzorin fue ejemplarizante de lo que te puede suceder si desafiás al poder omnímodo de los formadores de precios. Si bien fue sobreseído judicialmente de los cargos de corrupción con que había sido linchado mediáticamente, casi nadie se enteró de que su buen nombre había sido lavado, o en el peor de los casos, nadie creyó en su inocencia y continúa figurando en los catálogos de los grandes casos de corrupción en la democracia.

Al menos yo, no recuerdo el nombre de otro Secretario de Comercio que ejerciera durante estos 30 años de democracia (supongo que muchos, siquiera se acordaban de estos). Y fíjense por que recuerdo a los dos.

Resulta más que evidente que es un cargo en el cual, al momento de asumir (como en Matrix) te dan a elegir dos píldoras. Si elegís la azul, transcurrís en el mismo sin demasiados sobresaltos, es más, te hacés acreedor a la dulce y generosa complacencia de los poderosos. Se invisibiliza tu presencia al punto tal de que podés gozar de lo beneficios del rango sin molestas objeciones ni aviesas miradas cuestionadoras, probablemente el futuro te depare un retiro en algún directorio de esos que figuran sólo en las actas societarias pero que rinden pingues ganancias.

Pero si escogés la roja… ay! Cada dia de tu vida, el hecho habitual de abrir el diario o encender la TV, te anoticiará de la desmesura de tu perversidad incurable, pondrá en evidencia la magnitud del odio que “todo el mundo” siente hacia tu miserable persona, cargará sobre tus hombros la catastrófica predicción maya y también la irresponsabilidad de su fracaso. Ni hablar si perdurás una década en el empeño de bancar los trapos en ese paso de Termópilas que conduce directamente a la víscera más sensible de los argentinos, a pesar del replique de la gota china en tu cabeza.

Me van a decir que un Secretario de Comercio es una pieza fungible en un diseño de gobierno. Que nadie es imprescindible, que el desgaste, que el cambio de imagen, bla, bla, etc. Puede ser, habrá que verlo. Nunca fueron abundantes los domadores de dragones, menos aún los que se animan a poner la cabeza dentro de su misma boca llameante. Y Guillermo Moreno es uno de esos.

** Publicado por Rucio
El Polémico Secretario de Comercio.





domingo, 17 de noviembre de 2013

Homenaje a John William Cooke


Trató a Juan Domingo Perón de igual a igual, se consideró marxista y también peronista, fue un intelectual y también un hombre de acción. Viajó a Cuba y junto a su mujer se transformó en miliciano y participó de la Revolución.


Pocos personajes de nuestra historia ofrecen facetas tan singulares como la de este gran pensador y luchador argentino. Se llamó John William cuando seguramente él hubiera querido que lo denominasen Juan Guillermo. Se consideraba peronista pero también marxista. Como integrante del peronismo fue –casi seguramente– el único que discutió con el general Perón de igual a igual, sin inhibiciones ni reservas mentales: “Usted procede en forma muy diferente a la que yo preconizo y a veces, en forma totalmente antitética” (enero 1966). El único que se animó a decirle que algún día iba a morir (3/3/1962). Fue intelectual profundo, pero al mismo tiempo hombre clave de la resistencia y se lanzó con “una pistola 45? y tres cargadores de balas a parar a los marinos en junio de 1955. Tenía cierta renguera y un cuerpo voluminoso pero le encantaba bailar el tango. Fue invitado a un congreso en la Cuba presidida por Fidel y lo retuvieron en el aeropuerto porque el Partido Comunista de la Argentina dio malos informes sobre él (“¿Qué tal, Cooke? ¿Está en cana?”, le dijo sonriendo El Che y aclaró la situación). Una anécdota resume su independencia de criterio y su singularidad en sus opiniones. Ante las diferencias que mantiene con Jorge Antonio, Perón intenta limar asperezas y para calmarlo le dice: “Pero, Bebe, Jorgito es millonario, pero es un millonario peronista.” Y él le responde: “Mi General, disculpe, pero yo no hago esos distingos. Para mí, no hay millonarios peronistas y millonarios antiperonistas, los millonarios son millonarios, nada más.”

Pero quizá lo que otorga a Cooke una característica aun más propia y definida está dada por su permanente transformación, a través de la acción política, al mismo ritmo que se modificaban y profundizaban las posiciones de las grandes masas. Él provenía de una familia de irlandeses en cuyo hogar se hablaba en idioma inglés y en lo político, seguían la tradición radical. Su padre, Juan Isaac era dirigente importante de la UCR y como tal estaba alineado, en la segunda guerra, en el campo aliadófilo, donde también se situaba John en su juventud, celebrando los triunfos de Inglaterra. Pero al crecer el movimiento obrero y alcanzar el protagonismo del 17 de octubre, John ya integra el movimiento nacional e ingresa al Congreso de la Nación como diputado. Ha comprendido que soplan vientos de revolución y que el peronismo viene a cubrir el vacío dejado por los viejos partidos perimidos. Entonces afirma: “En 1945… el peronismo fue el movimiento que surgió y triunfó contra todos los partidos, que hizo saltar el esquema de los partidos repartiéndose el poder político. No es que la izquierda hacía crisis; es que era una parte de la superestructura política del imperialismo y saltó junto con los demás pedazos de esa superestructura…

El movimiento popular que atacó a la oligarquía y al imperialismo pasó a ser la izquierda por cuanto representaba las fuerzas del progreso nacional y de la independencia del extranjero. Fue una situación revolucionaria, donde los esquemas teóricos no servían. Faltaba una Izquierda Nacional y ese papel pasó a ocuparlo peronismo, aunque sin definirse como tal.”

En su gestión parlamentaria, siendo el diputado más joven –”El Bebe”, lo llamaron– fue el más sólido y brillante. A él recurrió Perón después del tremendo bombardeo del 16/6/55 para reorganizar el partido en la Capital Federal, pero ya era muy tarde y el gobierno fue derrocado en septiembre. Una tremenda noche de terror y silenciamiento cayó sobre el peronismo en esos años, resumida en la delirante mordaza del Decreto 4161 y los fusilamientos del ’56. Cooke, mientras tanto, intentaba armar “la resistencia” y era paseado por todas las cárceles del país, hasta “el infierno blanco” de Ushuaia e inclusive sufre simulacro de fusilamiento. Producido el triunfo de Frondizi en 1958, cuando los obreros se levantan contra la primera privatización impuesta por el FMI, Cooke avanza aun más en su posición e intenta convertir esa lucha en paro general, en un momento en que era delegado personal de Perón y más aun, el único a quien Perón alguna vez designa su sucesor para el caso de su muerte. Pero la burocracia política del peronismo le boicotea su acción y después de denunciarlos ante Perón, viaja a Cuba, donde adhiere fervorosamente a la Revolución. Tiempo más tarde es miliciano, al igual que su mujer Alicia Eguren, y participan en la lucha cuando el imperialismo invade Bahía de los Cochinos.



Reside unos pocos años en la isla y allí les explica a muchos cubanos mal informados los progresos alcanzados por las mayorías populares dela Argentina durante los dos gobiernos de Perón. Luego se desempeña como representante de Fidel y El Che ante Perón –en España– sugiriéndole se traslade para residir en Cuba, a lo cual el General le responde: “Dígale a Fidel que él hizo el asalto al Moncada llevando consigo el rosario y la cruz y yo todavía tengo que seguir llevándolos.”

En esa época es un socialista convencido, pero al mismo tiempo se sigue considerando peronista y por ambas banderas milita sin cesar. Parte de esa lucha queda registrada en una rica correspondencia mantenida con el General durante una década (1956-1966). Allí analiza la correlación de fuerzas, la imposibilidad, por ahora, de la revolución armada, como asimismo la importancia que tendría abandonar la conducción pendular de un movimiento policlasista para acentuar sus rasgos revolucionarios. Comprende que “el peronismo es el hecho maldito del país burgués”, pero también que “es un gigante invertebrado y miope” si no se dan los cuadros necesarios y no se desplaza a los burócratas políticos y sindicales. En esas cartas, Perón le explica que hay que ser como el Papa “que benedice a tutti”, que la unidad es lo principal dado el poderío del enemigo. Cooke no está de acuerdo y se atreve a refutarlo: “¿Para qué nos sirve el número, para votar en las elecciones que no se han de realizar?” También afirma: “Peronismo y antiperonismo son, en esta etapa, la forma en que se da políticamente la lucha de clases…” ¿Unidad para qué, entonces? Su opinión es que obispos, generales y empresarios están de más en el peronismo. Perón le contesta, desde su condición de líder nacional, que si los echamos, engrosaremos las fuerzas del enemigo. Otras veces el General no le responde por un tiempo. A veces, le señala: “Querido Bebe: … muchas gracias por su interesante y valiosa información…”Los “leales” y los desleales cuentan sólo para construir y debemos manejarlos a todos porque si no llegaríamos al final con muy poquitos. Por otra parte, hay dos clases de lealtad, la de los que son leales de corazón al Movimiento y los que son leales cuando no les conviene ser desleales. Con ambos hay que contar, usando a los primeros sin reservas y utilizando a los segundos, a condición de colocarlos en una situación en la que no les convenga defeccionar. Al final, no hay hombres buenos ni malos, más bien todo depende de las circunstancias, aunque para conducir es siempre mejor pensar que muchos son malos y mentirosos.” En otras cartas, también se observa que intenta persuadirlo: “Usted tiene razón, Bebe, lo felicito…” Pero al final de la carta le reitera la política de “bendecir a todos”, como única manera de aislar a la oligarquía y al imperialismo. Pero Cooke insiste: “Cuando usted ya no esté, ¿qué significará ser peronista?”



A finales de 1963, Cooke regresa a la Argentina y crea Acción Revolucionaria Peronista, es decir, intenta formar una izquierda orgánica, dentro del movimiento, para estar en condiciones de incidir mejor. Ideológicamente su influencia se difunde, pero –y él no tiene duda alguna– la clase trabajadora, en su abrumadora mayoría, está con el General y no ve la necesidad de construir el partido revolucionario que él preconiza.

En sus últimos años, concurre a varios congresos en Cuba y reafirma allí su posición revolucionaria e inclusive adhiere a la lucha armada que se intenta en otros países. Sin embargo, aún en sus últimos escritos, sostiene: “Perón no sólo es el artífice de la única época en que el obrero fue feliz –década que el tiempo y el drama de hoy embellecen aun más en la nostalgia– sino algo más importante es el recuerdo, el símbolo de la primavera revolucionaria del proletariado argentino, del momento cenital de las grandes conquistas sociales y las reivindicaciones nacionales. Por eso, su mito se alimenta tanto de la adhesión de los obreros como del odio que le profesa la oligarquía, no atenuado por los años porque es el reverso del amor de los humildes… En el laberinto de la política a ras del suelo a que nos tiene acostumbrados nuestros burócratas Perón parecería estar bloqueando vaya a saber qué caminos. Desde las alturas de las formas superiores de la lucha revolucionaria, no obstruye nada. El pueblo se resiste a abandonar sus ídolos acreditados en el milagro por otros no probados… El prestigio de la conducción revolucionaria de esta nueva generación se cargará con el magnetismo de su antiguo prestigio.”


Por entonces, lo toma el cáncer. A los pocos meses, el 19 de septiembre de 1968, muere, pero su última voluntad –hecho todavía insólito en la Argentina de 1968– es que sus órganos vitales sean usados para quien los necesite, como si quisiera que sus ojos siguieran viendo, desde otro cuerpo, los cambios de su querida América Latina, en busca de su destino igualitario.

* Norberto Galasso




lunes, 11 de noviembre de 2013

Todavía cantamos!


El FpV, a 7 puntos de ganar nuevamente en primera vuelta.
Lejos de constituirse en alternativa electoral propia, la oposición tiene como toda estrategia hoy la victimización permanente y la apuesta al error del oficialismo que lo conduzca al ballotage.

Nadie desconoce ya ni duda: el FpV es la primera minoría electoral y duplica al mejor referente opositor según el mosaico delineado tras el 28 de octubre de 2010 y aun agrupando al pan radicalismo de manera forzada, la diferencia entre primera y segunda minoría cae por debajo de los 12 puntos como se observa en el cuadro que acompaña esta columna generado por el Ministerio del Interior.

Nada indica que ese paisaje electoral empeore para el oficialismo tras un año como 2014, con crecimiento económico del 5% en promedio, el despliegue de políticas sociales de gran escala, como la Asignación Universal por Hijo, la mejor política social desde la recuperación democrática actualizada por sobre el nivel de aumentos de precios, al igual que jubilaciones y pensiones y el nivel promedio de paritarias todos por sobre cualquier índice de inflación, incluso los privados realizados por consultoras opositoras.

Por el contrario, el 33% de los votos del 27 de octubre parece ser el piso electoral del FpV a nivel nacional.

Asumida la circunstancia de fragmentación opositora como creciente e irreversible desde el año 2003, se refuerza la estrategia del oficialismo que como lo hiciera en los años 2007 y 2011, apuesta al triunfo en primera vuelta.

Asumen los estrategas del FpV que con solo obtener el 40% de los votos no hay riesgo de derrota pues ninguna alternativa se acerca a menos de 10 puntos y en las elecciones presidenciales, recordemos, se triunfa en primera vuelta si alguna fuerza supera el 45% de los votos u obtiene el entre el 40% y el 45% y más de 10 puntos de ventaja sobre la segunda fuerza.

En este sentido, todo el arco opositor confía en que el oficialismo no alcanzará el ansiado 40% y ninguna oferta propia, sino el ballotage resolverá su falta de liderazgo ya estructural.

Cabe destacar que 40% de votos positivos suponen 37% de votos efectivos, sin nulos, impugnados y en blanco, lo que achica la base de cálculo y da un impulso matemático, para alcanzar la meta del 40%.

Quién resultará segundo en la primera vuelta parece ser hoy la real competencia entre las diversas expresiones de la oposición.
No es gran cosa, en especial tras decretar la muerte del kirchnerismo durante casi un lustro desde la crisis de la 125, y es especialmente poco atractiva la oferta para los segmentos de poder económico con dos largos años por delante con crecimiento y oportunidades de negocios.

El ejemplo de Mauricio Macri ilustra el camino de la oposición. A la espera de que las multitudes aclamaran su candidatura presidencial, no se presentó en octubre de 2011 y debió precipitar su postulación de cara a 2015 de manera extemporánea tras las elecciones de octubre de este año. Su cálculo no consideró la aparición del Frente Renovador encabezado por Sergio Massa que compite de manera notable por su mismo electorado de centro derecha y para mal del Ingeniero Civil y su troupe, el FR logra aún más penetración que el PRO en los sectores populares.

Así, a dos años de las elecciones nacionales, como sucediera tras las elecciones de junio de 2009, lo que queda ver es si el oficialismo decide una candidatura con el aval de la Presidenta y llega o no al 40% de votos.

Está lejos y cerca a la vez: lo separan siete puntos de votos efectivos del triunfo en primera vuelta, sin que ninguna alternativa opositora pueda impedirlo por propia gravitación.

La corporación mediática opositora tomó nota de esta realidad: no logró instalar un candidato hegemónico, ocupa el lugar de la oposición política y confronta abiertamente con el oficialismo para evitar ese 40% intentando esmerilar a cada uno de los posibles candidatos oficialistas eventuales. Como efecto colateral en su tan activa confrontación, hunde cada día más a los dirigentes opositores, que son los que finalmente concurrirán a elecciones en el año 2015.

La presencia del Grupo Clarín como adversario, y las certeza de que la verdadera confrontación es hoy Gobierno-Corporaciones, como en el período 2009-2011, señalan el campo de disputa de cara al año 2015, invisibilizando a la oposición política que tras la declaración de constitucionalidad de la ley de medios quedó aturdida y en estado de perplejidad, con excepción de Elisa Carrió, la dirigente opositora que mayor activismo muestra en la defensa corporativa.

Ahora bien, esta estrategia del Gobierno nacional de sostener este escenario es simétrica al accionar de los grupos mediáticos opositores, por lo que cabe esperar una escalada del conflicto y ausencia creciente de oposición política encarnada en dirigentes partidarios.


Es un escenario muy propicio al oficialismo -como lo demostrara lo acontecido en el lapso 2009-2011- , si es que no comete errores conceptuales fundados en desconocer que, a diferencia de los grupos mediáticos que lo adversan, el oficialismo efectivamente constituirá una oferta electoral en 2015.

La gestión de gobierno y el mensaje que la comunique, entonces, debe realizar sintonía fina y tener en cuenta al conjunto, y no constituirse exclusivamente de cara a su confrontación con los grupos mediáticos, que aun siendo una disputa medular, no es tema que interese masivamente a la ciudadanía.

Reiteramos, la gestión y su comunicación es el núcleo de la suerte electoral del oficialismo.

En este sentido, garantizar la aplicación de la Ley de Medios ya avalada en su constitucionalidad definitivamente por la Corte Suprema es importante, pero lo es aún más -por citar dos grandes desafíos de la etapa 2013-2015- la generación de empleo genuino y formal -en particular en el sector industrial que muestra hoy escaso dinamismo-, el sostenimiento de la tasa de cobertura previsional -hoy la más alta de la región en torno al 95%- el mantenimiento de la cobertura a pesar de la robusta tasa de informalidad laboral que afecta al 34% de los asalariados -y al 62% de los monotributistas- y que aparece inelástica a la baja desde el año 2008.

Así las cosas, desde el punto de vista electoral, el escenario configurado por las elecciones de medio mandato de este año muestra una primera minoría oficialista muy consolidada en torno al 33% de los votos con grandes chances de superar el 40% de los votos sostenido en la gestión y su comunicación, y un archipiélago opositor que difícilmente logre resolver su fragmentación y apuesta a ingresar como segunda minoría al ballotage, como lo hizo con anterioridad a las elecciones de 2011 con el resultado que todos conocen y muy bien.


* Artemio López
   Consultora eQuis.